Siempre pensé que el primer juego de MSX sobre el que hablaría, tanto por horas dedicadas como por amor al mismo, sería Nemesis; pero como de costumbre, la vida da muchas vueltas y en ocasiones llega algo que te hace cambiar de planes. Ese es el caso de Magical Tree, un divertido juego desarrollado por Konami en el año 84 para MSX del que a continuación, además de una pequeña reseña, encontraréis una breve reflexión.
En Magical Tree, acompañaremos a un pequeño y simpático indio en su ascensión hacía lo más alto de un gigantesco árbol coronado por un castillo donde se aguardan sus padres. Y creedme cuando os digo que se trata de un árbol realmente alto, pues de nuestros progenitores nos separan nada más y nada menos que 2000 metros de altura.
Por tanto, nos encontramos ante un título de scroll puramente vertical con un fuerte componente plataformero que hacen de Magical Tree una experiencia tan simple como adictiva. Para llegar a lo más alto, nuestro pequeño protagonista hará gala de una serie de acciones tales como trepar cuerdas o escaleras, colgarse y descolgarse de las ramas del árbol, y como no podía ser de otro modo; saltar.
Lógicamente, no todo será tan sencillo como simplemente subir. A lo largo del árbol, iremos encontrando un sinfín de enemigos dispuestos a dificultar la ya de por sí agotadora escalada. Búhos, gusanos y un enemigo indefinido que recuerda a una araña, sin olvidarnos de las nubes que nos acosarán en algún que otro sector son algunos ejemplos de lo que vamos a encontrar y que deberemos evitar a toda costa, con cuidado siempre de no caer y tener que empezar de nuevo. ¡Pero no todo iba a ser malo! además de enemigos, encontraremos un variado número de ítems como distintos tipos de fruta, diamantes o flechas, cuya recolección se reflejará en nuestro marcador en forma de puntuación extra.
Magical Tree, consta de 10 niveles de manera que si el árbol tiene 2000 metros, cada 200 metros, pasaremos a un nuevo nivel, de modo que en caso de caer estrepitosamente al vacío, no tendremos que empezar otra vez de cero, siempre y cuando, como no podía ser de otra manera, no nos quedamos sin vidas.
En cuanto al apartado técnico, nos encontramos delante de un título alegre, simpático y colorido. Las animaciones del personaje resultan fluidas y algunas como por ejemplo la de trepar o quedarse colgado de una rama, están realmente logradas.
El baile que se marca al final de cada nivel, es impagable |
En cuanto al apartado sonoro, me temo que irá a gustos; la melodía es siempre la misma a lo largo de todo el juego y solo dejará de sonar en algún que otro momento puntual. A mí personalmente me pone de un buen humor increíble y me parece un soniquete realmente alegre. Claro que, puedo entender que haya gente a la que pueda resultarle cargante pasados los primeros minutos de juego. Todo es cuestión de escucharla y decidir si terminaremos moviéndonos alegremente al son de la música o bajándole el volumen para evitar escucharla.
En definitiva y como ya dije al principio, tenemos un mecánica muy simple pero que a su vez resulta extremadamente adictiva y que nos invitará a intentarlo una y otra vez. Dicho esto, pasemos de una vez a lo que todos estabais esperando: la reflexión y el desvarío. Es probable que algunos se estén planteando ¿quien puede hacer una reflexión de un juego puramente arcade y de tan simple argumento? Pues alguien capaz de sacarle punta a todo, es decir, yo. No sé si será el síndrome de abstinencia reflexiva y el haber estado hasta arriba de exámenes y trabajos o qué, pero sí; esta mañana al despertarme y con los párpados aún pegados, he llegado a la conclusión de la fuerte carga simbólica implícita en Magical Tree.
Por un lado, tendríamos al árbol, la representación del camino a seguir hasta llegar al objetivo previamente planteado. Siempre he sido de la opinión que cualquier meta que decidamos superar, se divide en fases. Fases por las que deberemos inevitablemente pasar, hasta en este caso, llegar a la copa.
En cada una de esas fases, iremos dando con una serie de obstáculos a sortear -en este caso los enemigos - que, lanzándonos al vació, tratarán de desanimarnos. Aves de rapiña como serían el búhos, o gusanos que tratarán de arrastrarnos al fracaso, son sólo algunos de los ejemplos que he podido encontrar mientras jugaba.
Por último, el castillo sería la clara evidencia de la voluntad férrea del individuo por alcanzar su meta. La recompensa al trabajo bien hecho, el haber sido capaz de superar todas y cada una de esas fases, al haberse levantado una y otra vez en vez de desanimarnos y tirar la toalla. El premio a la perseverancia y al esfuerzo así como la satisfacción personal de haber logrado un fin concreto previamente planteado.
Para que luego digan que jugar no da qué pensar...
Como te prometí,a la que he tenido un momento de tranquilidad delante del PC te comento.
ResponderEliminarEl juego parece divertido, me lo apunto para probar. Pero lo que mas me ha gustado ha sido la reflexión sobre el juego.
De una idea tan tonta como es escalar un árbol, has sacado una gran reflexión. Me encanta cuando los jugadores vamos mas alla y vemos simblogia donde supuestamente no las hay.
Seguro que los programadores pusieron un indio escalando por poner algo, como podian haber a Trazan o la mona chita.
Aunque seguramente el juego no tenga ningún mensaje, me gusta mucho la reflexiono que has hecho y coincido contigo. Se puede tomar de esa manera.
Si nos paramos a pensar, casi todos los videojuegos tiene esa filosofía. El fin ultimo de estos es superar obstáculos y llegar a una meta. Algo que ocurre diariamente a todo ser humano.
Supongo que por eso gustan tantos los videojuegos, nos permiten intentar superar obstáculos intentándolo las veces que quieras y si sufrir grandes consecuencias.
P.D:
Ahora para que los autores digan que si existía ese mensaje XD
Gracias Sikus por pasarte y dejar tu comentario :D
EliminarEl juego en sí es muy simple pero como ya te he dicho, realmente entretenido y adictivo, aunque si bien es cierto, no es de los juegos más difíciles de MSX.
Probablemente, es lo que dices, podrían un indio como podían haber puesto un mono o un escalador o vete tú a saber qué. De todas las maneras, ya me conoces, soy ligeramente retorcido, y me gusta mucha sacarle punta a todo tratando de encontrarle un trasfondo.
Y como bien dices, en mayor o menor medida, siempre es posible encontrar un mensaje en los videojuegos. Al fin y al cabo, el videojuego en sí, implica superarse hasta llegar al final del asunto.
Me encantaba ese juego Suso,como siempre has sacado tus conclusiones ,jejeje,muy buenas por cierto.
ResponderEliminarCada vez que veo o juego uno de estos me sale una sonrisilla por los tan buenos recuerdos que tengo del MSX y los ratos que pasaba con mi padre probando juegos,vaya tiempos tio.
Gracias Nici :D A mi también me gusta muchísimo Magical Tree. Es un juego la mar de simpático y entretenido, y creo que uno de los que más he jugado en MSX desde que lo tengo. Lo llevo incluso en el emulador de MSX de la PSP para esos ratos fuera de casa en los que me entran las ganas de jugar XD
EliminarSiempre vienen bonitos recuerdos al jugar a juegos de la infancia o de hace unos años... aparte, somos unos nostálgicos u__u
Será porque cuando jugábamos q juegos como este éramos unos niños y nuestra única preocupación era jugar, jugar y jugar.Nada de hipotecas,hijos, trabajo etc... Por eso siempre serán tiempos mejores DE
ResponderEliminarA parte de la bonita reflexión (el camino, superar obstáculos y la recompensa final), el dibujo de la carátula del juego es adorable! Eso sí, reconozco que no lo conocía, aunque sólo leyendo MSX y Konami la calidad está garantizada (además, he buscado un video por youtube y se ve tan divertido como lo describías aquí), me lo guardo por si algún día me pongo el Bluemsx...
ResponderEliminarUn saludo!
La ilustración es puro amor jajajaj. Ya no se hacen carátulas así. Es un juego poco conocido, pero deberías darle una oportunidad. Es muy simple, pero precisamente ahí radica su encanto, en la sencillez. Ya dirás que te pareció cuando lo pruebes :)
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