Destripando y limpiando un mando de MegaDrive de 3 botones

Los que me conocéis o llevais un tiempo leyéndome por aquí, sabeís que me encanta destripar aparatos y que además me considero un tipo bastante limpio (por no autodenominarme maniático). Así que aprovechando que tenía que pegarle un repaso al mando de 3 botones (y Start) de mi queridísima MegaDrive y que la entrada sobre como destripar y limpiar un mando de GameCube tuvo bastantes visitas, he decidio realizar una entrada similar a la anterior, pero esta vez centrada en el mando de la 16 bit de Sega.

 

A decir verdad, desmontar y hacerle mantenimiento a un mando de MegaDrive no es algo que tenga demasiado misterio, es un mando muy sencillo y sin complicación alguna, pero ya que me ponía, no me costaba nada sacarle unas fotillos y subir el procedimiento. Nunca sabes si algo así puede ayudar a alguien, o simplemente alimentar la curiosidad de quien quiera cotillearle las tripas al mando y no tenga ganas de abrirlo. Dicho esto, vamos allá.

Para la limpieza que hoy nos ocupa no vamos a necesitar gran cosa, ni siquiera destornilladores especiales como en el caso de GameCube. En la foto os dejo todo lo que utilicé que fue lo siguiente (excepto las pinzas que las cojo siempre por si acaso y en esta ocasión no me hicieron falta):

- Un destornillador de estrella

- Un cepillo de dientes

- Bastoncillos de algodón

- Alcohol isopropilico

- Agua, lavavajillas y una esponja (aunque no se vea en la foto)

Para abrir el mando deberemos retirar los seis tornillos de la parte posterior.

El mando de MegaDrive tiene únicamente 6 tornillos en la parte trasera, lo primero que tenemos que hacer será retirarlos todos y dejarlos, como siempre os digo, en algún recipiente para no tener que lamentar su pérdida más tarde. Una vez retirados los tornillos, al quitar la carcasa lo que nos encontraremos será lo siguiente. 

Como veréis, en la parte trasera hay una pieza de plástico. Esta pieza es la que presiona las gomas de la cruceta, porque como veréis más adelante, los contactos de la misma, no están en la parte de delante junto al resto, sino en la parte trasera. Un método un tanto enrevesado que yo personalmente no había visto hasta el momento, pero curioso cuanto menos. Esta pieza no va cogida con nada, así que lo único que tenemos que hacer es retirarla y veremos que justo debajo está la membrana de goma que retiraremos también. 

Como podéis ver, una vez retiada la pieza de plástico y la membrana, podemos ver que los contactos de la cruceta están en la parte posterior de la placa.

Ahora procederemos a liberar la placa de la carcarsa delantera. Como siempre recomiendo, tened cuidado con los cables finos. No hagáis el bruto no sea que alguno se rompa o se desuelde y se complique el asunto. En este caso os aconsejo también que os quedéis con la posición del cable ya que si no lo volvemos a colocar del mismo modo, el mando no cerrará. 

Aquí podemos ver las tripas del mando. Esta es la parte delantera. Como veis es un mando muy sencillo.

Una vez hayamos retirado la placa la apartaremos momentaneamente, y retiraremos los botones A, B, C, Start (junto con sus respectivas gomas) y la cruceta. Todo esto lo sumergiremos a continuación en una palangana con agua templada (no hace falta que achicharréis el mando) y lavavajillas. No es que este mando estuviera excesivamente sucio, pero la mugre que tenía era añeja así que lo dejamos en remojo para que se reblandezca y mientras tanto vamos trabajando sobre la placa. 

Para la placa como de costumbre tiraremos de alcohol isopropílico que como ya sabéis no deja residuos. Lo que hago yo siempre es echar un poquito sobre el cepillo de dientes y darle a toda la placa. Utilizad un cepillo suave y pasadlo con cariño, no es necesario frotar como si no hubiera un mañana.

Limpiad también los contactos de las gomas, siempre sale porquería aunque no lo parezca.

Con la placa ya limpia, es momento de sacar del agua las piezas de plástico. Después de aclarar los restos de jabón, utilizando un cepillo de dientes, incidí sobre aquellas partes en las que aún había restos de porquería. Una vez limpio, se deja escurrir para que suelte el exceso de agua y con un trapo, se secan las partes concienzudamente asegurándonos que no quedan resto de agua. Si contáis con un compresor o un bote de aire comprimido, podéis pegarle un soplido en las partes más estrechas para aseguraros que sale el agua de cualquier recoveco. 

Aquí tendríamos el mando ya limpio y listo para montar, el proceso de montado es el mismo que el de desmontado pero a la inversa. No tiene ningún misterio.

Una vez hecho esto, lo único que nos queda es montar nuevamente el mando. El proceso de montado es igual que el de desmontado pero a la inversa. Simplemente tened en cuenta la posición del cable a la hora de cerrar el mando, si lo ponéis mal no cerrará. Por lo demás no tiene ningún misterio y como habréis podido comprobar es un proceso realmente sencillo de realizar. Así que espero que si teníais dudas sobre como limpiar vuestros mandos, este post os haya sido de ayuda. Y en caso de que simplemente os hayáis dejado caer por aquí para alimentar vuestra curiosidad, espero que lo hayáis conseguido. 

Os dejo aquí este detalle tan fardón de la cruceta para cerrar la entrada.