Ha llegado el tan ansiado momento, hoy hablaremos de ese juego con el que he establecido una tremenda relación de amor odio. Ese juego del que me habéis oído despotricar una y mil veces por redes, y al que amigablemente me gusta denominar como "el sobrevalorado Bloodborne", aunque haya levantado más de una ampolla. Así que, dicho esto, vamos a empezar con los formalismos habituales de esta santa casa, y más abajo os explicaré porqué el aclamado souls exclusivo de Play Station, se me hizo tan cuesta arriba, pese a terminarlo con platino incluído.