DmC: la opinión de un fan incodicional

Queridos amigos y seguidores, hoy en DNSTUFF, tenemos algo inusual, y es ni más ni menos que una entrada dedicada a una novedad.

En esta ocasión no seré yo quien escriba la entrada, y es que, ¡me ha salido un colaborador! La entrada que os presento a continuación está íntegramente escrita (excepto esta pequeña introducción) por mi buen amigo Edu. 

A modo de anécdota, me gustaría comentar, que Edu descubrió la saga cuando hace años llevé a su casa el primer DMC. Jamás me olvidaré de su cara de asombro y sus suplicas para que le dejara el juego durante el fin de semana. Esto fue un sabado, y el lunes cuando nos volvimos a ver, se había terminado el juego.

Un auténtico fan de la saga que ha completado todo lo completable de todas y cada una de las entregas de Devil May Cry. Desde luego, no voy a encontrar a nadie que pueda ofreceros una opinión mejor.

No me extiendo más, gracias a Edu por la colaboración, y espero que disfrutéis de su aportación :)

Buenas a tod@s. Hace algún tiempo que me he encaprichado con la idea de hacer una entrada de blog pero no encontraba el tema idóneo a tratar. Había pensado en hacer un análisis de un juego antiguo de la N64 (para los más curiosos, se llama Jet Force Gemini) pero con la reciente salida de un título que ha levantado polémica, nada me parece más acertado que hablar sobre este juego, que además, forma parte de una de mis sagas favoritas. ¿Qué os parecen los “hack ‘n slash”? ¿Os gustan? Si os describo a un tipo chulesco, de pelo plateado, con una gabardina roja y cuyas armas favoritas son una  enorme espada y un par de pistolas, ¿qué nombre os  viene a la cabeza? Si la respuesta a la segunda pregunta es  sí,  calculo un 1% de posibilidades de que no sepáis que se trata de Dante, el protagonista de la saga Devil May Cry de Capcom: el cazademonios más popular del mundo de los videojuegos. Antes de empezar quiero aclarar que el juego que voy a analizar a continuación no lo he podido terminar aún (por desgracia para mí, no dispongo de recursos económicos para hacerme con él, así que dependo de un amigo si quiero jugar…).

Pese a ser fan acérrimo de la saga como ya he dicho antes, soy crítico con cada entrega que ha salido al mercado. Por ejemplo, reconozco que las cámaras ingame de Devil May Cry 2 son horribles, y que Dante, a diferencia del primero, es más soso que un yogur natural. Pocas cosas se  le pueden criticar a sus predecesores, “Devil May Cry 3 -Dante’s awekening” y “Devil May Cry 4” si bien es verdad que tras las malas críticas por parte de los fans que recibió la segunda parte decidieron andar sobre seguro y hacer las posteriores entregas lo más parecidas posible a la primera, que a mi parecer, es una obra maestra. Pero no estoy aquí para hablar sobre los otros DMC, si no por el nuevo reboot, que aparece a la venta como “DmC –Devil May cry”. Pues bien. Los reboots tienen fama de ser muy mal acogidos por los fans del original, pero es que en este caso se lo han tomado como si hubieran profanado una reliquia, como si les hubieran escupido a la cara. Es por esto que me veo con el deber moral de dejar en evidencia a las masas aborregadas, que sin criterio alguno se dedican a soltar los mismos clichés estúpidos una y otra vez. Desde el primer tráiler oficial en el que veíamos el nuevo aspecto de Dante –el cual, por cierto, sólo difiere en el pelo –ya lo dejaron sentenciado. Claro, si  es que tienen razón, un juego en el que el protagonista tiene el pelo moreno y no blanco, tiene que ser un bodrio. Vamos no me jodas. Lo más sorprendente es que hubo una reacción en cadena por la red, y veías gente que sin haber probado siquiera la demo arremetían contra DmC con frases como “queremos que todo vuelva a ser como antes” o “han matado a Dante”. Yo lo siento mucho, pero tras 4 entregas moviendo a un personaje albino, al final acabas cansándote. El cambio de look al personaje le ha venido fenomenal. También he leído por ahí:  “¿reboot? Crapcom ya no sabe qué inventar”. Aunque reconozco que lo de Crapcom tiene gancho, el mensaje es totalmente contradictorio. ¿No querías cambios? ¿ Qué mejor cambio para un juego que renovar el personaje? En fin, que a veces pienso que la gente se queja por vicio. O que la opinión de las masas es más importante que la propia, no sé. El caso es que yo soy de los que piensan que un libro no se puede juzgar por la portada, o en este caso, que un juego no se puede juzgar por un tráiler de 2 minutos. Empiezo el análisis.

Tan solo con ver el vídeo de introducción, supe que la historia iba a ser enfocada de una manera muy distinta que los otros Devil May Cry. En este nuevo mundo, esta vez creado por  Ninja Theory, los humanos iban a tener un papel menos secundario. Fue lo primero que me llamó la atención, y en cierta manera lo agradecí. Los demonios no son simples criaturas que se dedican a despedazar al primero que ven; ahora extienden sus garras en todo: publicidad, noticias, sistema bancario… los humanos son simples marionetas, esclavizados, sin ni siquiera haberse dado cuenta de ello. Una manera más inteligente y efectiva de dominar el mundo. ¿Cómo te vas a revelar contra tu opresor cuando no eres consciente de que eres oprimido? Sólo hay una manera… y se llama Dante. Tras los primeros 10 minutos de juego me di cuenta de que la historia no sólo iba a estar a la altura de otros DMC (lo cual, siendo realistas, tampoco es muy complicado) sino que profundizaría más.

Por otra parte, los combos que puedes encadenar son increíbles, si habéis jugado sabéis a qué me refiero. El sistema de habilidades deja a tu alcance un sinfín de combinaciones con las que destrozar a los siervos de Mundus. Para perfeccionar nuestras técnicas tendremos acceso a un modo entrenamiento que además nos dejará probar la habilidad que nos interese antes de adquirirla. Hay varias armas distintas y cada una tendrá una finalidad para avanzar en el juego, la cual cosa evitará que sintamos que tenemos el síndrome de Diógenes, acumulando armas que no vamos a usar nunca.

El juego es muy variado. Cada lucha contra un jefe es única, cada uno se vence de una manera totalmente distinta. Los niveles plataformeros, complementados con la estética del juego (la cual es, por cierto, impresionante) nos darán una experiencia de juego muy agradable. Dante tiene movimientos muy dinámicos que le permiten superar casi cualquier obstáculo que se le ponga por delante. La nueva jugabilidad permite efectuar combos vistosos con cierta facilidad, utilizar las nuevas armas demoníacas será fundamental para mantener a raya a los enemigos. Podremos atraerlos  a nosotros como hacía Nero en Devil May Cry 4 con su Devil Bringer, o impulsarnos nosotros mismos hacia ellos.

El apartado gráfico no es nada a destacar, pero cumple. La mayor parte del juego transcurrirá con el motor gráfico, usando sólo cinemáticas en momentos trascendentales. Pese a que no destaca la calidad gráfica con respecto a otros juegos del género, se agradece la ausencia de ralentizaciones; en las 10  misiones que jugué no aprecié ni una sola.

En cuanto a la dificultad, si eres de los que disfrutó enfrentándote a demonios en el modo "Dante debe morir", y te gustan los retos aún más difíciles, éste es tu juego. DmC nos presenta una modalidad que roza lo enfermizo;  nuestros enemigos nos mandarán de UN GOLPE al otro barrio, mientras que nosotros tendremos que llenarlos de plomo y asestarles una buena dosis de acero para acabar con ellos.

La estética del juego, insisto, es impresionante. La atmósfera es mucho más "demoníaca" ahora. Mensajes subliminales en las paredes, muros que aparecen de la nada y escenarios boca abajo son sólo algunas de las cosas con las que os encontraréis. Otro aspecto a destacar es  el lenguaje soez, que por raro que parezca, es un punto a favor, le da un toque más cañero al juego y hace que Dante conecte más con el jugador. ¿A quién no se le escapa a veces  alguna que otra jugando? Del estilo: “dónde coño está X lugar?” o “¿¿qué le pasa a este hjo puta que no muere?? No os preocupéis; Dante  lo dirá por vosotros. Pero seguro que lo seguiréis diciendo, igual que yo.

En definitiva, un must have –o  mejor expresado, un “Should have”, como bien dijo Suso en la última entrada, cada uno decide a qué juega –si te gusta el género "hack n' slash".

Eduardo Lipperheide para DNSTUFF