Professional Fighter Pad (Mega Drive)

He andado detrás de un mando de seis botones para Mega Drive desde que comprase años atrás Street Fighter II.

En vista de que no era capaz de dar con uno, terminé por vender el juego y olvidarme por un tiempo. 

Con el paso de los años, y tras dar con un Eternal Champions a precio de ganga, decidí que había llegado el momento de reanudar la búsqueda. 

A decir verdad me lo he tomado con bastante calma, compré el citado juego hará por lo menos tres o cuatro años y no ha sido hasta este pasado domingo que la búsqueda del mando se dio al fin por terminada.

Siempre tuve en mente que el mando que comprase sería el oficial, hasta que se cruzó en mi camino el mando del que hoy os hablaré.

Debo reconocer que nunca he sido muy partidario de comprar mandos de terceros. Ya sea por tacto, calidad de los materiales o durabilidad de los mismos, siempre preferí comprar el mando oficial a uno compatible. Pero esta ocasión fue distinto, y a continuación os expondré los motivos que me llevaron adquirir este mando no oficial para Sega Mega Drive conocido como Professional Fighter Pad.

He buscado bastante sobre el mando por internet, y lo poco que he encontrado sólo a conseguido llevarme a confusión. Hasta donde sé, hay varias versiones que se diferencian únicamente en el nombre que viene estampado en la parte central.

Digo lo de confusión tras encontrar un mando que en el que en vez de poner "Fighter II", ponía SEGA:

Además en ningún lugar de la caja aparece la compañía responsable de su fabricación. Lo único que encontramos es el logotipo de un simpático e inquietante conejo rosa en la esquina inferior derecha de la caja que poco o nada aclara sobre su procedencia.

Pero dejemos a un lado las preguntas místicas y centrémonos en el mando en sí. 

Lo primero que llama inevitablemente la atención cuando tenemos el mando entre manos, es el panel central compuesto por dos botones - MODE y START- y seis leds de color rojo.

Veo innecesario explicar la utilidad del botón START, pero creo que resulta interesante hablar sobre el botón MODE. 

Hasta donde he podido averiguar, la función principal del botón MODE, es la de permitir el uso del mando en aquellos juego incompatibles con los pads de seis botones. Simplemente pulsando el botón, inhabilitaremos los botones tres botones extra se deshabilitan.

Pero como bien sabréis, soy un tipo curioso, y buscando información sobre dicho botón, encontré una lista de juegos en los que al parecer, los desarrolladores lo utilizaron como botón extra. 

De la parte central sólo queda hablar de los leds, cuya única función consiste en indicar que botón estamos pulsando. 

En cuanto a los botones, más allá del color, encontramos diferencias en cuanto a recorrido y forma. Los botones inferiores - A, B, C - disponen de menor recorrido que los superiores - X, Y, Z -. Esto va más bien a gustos, pero a mi personalmente y pese a que la respuesta es excelente, me hubiese gustado un mayor recorrido en los botones inferiores.

Además del recorrido, se diferencian - tal y como he comentado antes- en la forma siendo los superiores cóncavos y los inferiores convexos. 

Terminaré con la parte frontal hablando de la cruceta. No es casualidad que haya dejado la cruceta para el final, ya que es aquí donde radica la mayor gracia del mando. 

Seguramente los más observadores llevéis un rato preguntandoos el porque de ese agujero en la parte central de la cruceta. 

Pero antes de despejar el enigma, me vais a permitir que haga una breve valoración sobre la cruceta.

A excepción del misterioso agujero, a simple vista nos encontramos con una cruceta prácticamente igual a la del mando oficial. Las diferencias las encontramos a la hora de jugar. Obviando que al igual que con los botones hubiese preferido un mayor recorrido, la cruceta es suave y precisa, no da ningún tipo de problema con las diagonales, y los cantos resultan bastante agradables al tacto por lo que podremos prolongar las horas de vicio sin renunciar a perder nuestra huella dactilar.

Ahora ya sí, hablemos del dichoso agujero. Pero para entender que pinta un agujero ahí en medio, primeramente debo aclarar que dentro de la caja no venía sólo el mando:

Eso que veis arriba, es ni más ni menos que un joystick que podremos acoplar de manera opcional enroscandolo a la cruceta.

Si he de ser sincero, la primera vez que lo vi, pensé que sería terriblemente incomodo. Nada más lejos de la realidad. Lógicamente, no es comparable a un buen Stick Arcade, pero tras probarlo con Eternal Champions y Mortal Kombat 3, puedo decir que cumple de sobra con su cometido. Además, en caso de que no nos guste, siempre tenemos la opción de quitarlo.

Para ir terminando, echemos un vistazo a la parte trasera.

Si le damos la vuelta al mando, nos encontramos con un par de funciones bastante típicas de los mandos compatibles. El modo TURBO FIRE, y el modo SLOW MOTION.

El modo SLOW MOTION -como su propio nombre indica-, ralentiza la acción con un rudimentario efecto  cámara lenta bastante desagradable. 

Por otro lado, al activar el modo TURBO, nos evitamos aporrear un botón repetidamente, limitandonos a mantenerlo pulsado. Ideal para esos días en los que estamos más vagos de lo habitual, o para aquellos a los que se les canse rápido el dedo. Cabe decir que no todos los juegos se llevan bien con estas funciones, y algunos dan problemas si las activamos.

No puedo terminar de hablar sobre la parte de atrás sin mencionar los dos huecos o hendiduras que, yendo más allá de lo estético, nos proporcionan un mejor agarre evitando que el mando se resbale. Muy prácticas sobretodo en caso de utilizar el joystick.

En conclusión, el mando cumple de sobras con las expectativas depositadas en él. La sensación a nivel general es buena, y pese a lo comentado sobre el recorrido de los botones, resulta muy cómodo al tacto. El acabado es más que correcto y no hay botones "bailongos" como en muchos mandos de este estilo.

Además, cuenta con un cable ligeramente más largo que el del mando oficial (al menos el de 3 botones que es el que yo tengo), que siempre es de agradecer.