El pasado 23 de abril fue un día grande para los fans de NieR y Drakengard. No solo porque la nueva versión actualizada que tuvimos el placer de recibir en consolas actuales nos permitirá rememorar aquellos momentos sensacionales que vivimos en su día, sino porque gracias a esta actualización, mucha gente que en aquel entonces se lo perdió, podrá disfrutar, descubrir y sobretodo vivir, la experiencia tan intensa y maravillosa que ofrece esta obra maestra del mundo de los videojuegos.
Como bien sabréis lo que estáis esperando impacientes la salida de Resident Evil Village el próximo 7 de mayo, ayer por la tarde, los señores de Capcom nos ofrecieron la oportunidad de jugar otros tristes treinta minutos (os reto a que me mandéis un audio diciéndolo sin encallaros) a la segunda demo de la que será la octava entrega de la franquicia. En esta ocasión, dejábamos atrás el pueblo para adentrarnos en el castillo Dimitrescu, y como ya hice la semana pasada, aquí os dejo mis impresiones.
Debo reconocer que en los últimos años, todo lo que sea despotricar sobre noticias que antaño me hubieran puesto de mala leche, es algo que comienza a darme fatiga. Tal vez porque con la edad he ido perdiendo bravura o porque simplemente todo lo que pase en la industria me la trae bastante floja. Pero dadas las noticias que han ido saliendo en las últimas semanas, no he podido evitar la tentación de hacer un pequeño recopilatorio hablando un poco de las últimas travesuras de Sony, que van desde los cierres de stores, pasando por la famosa pila CMOS, hasta el último "escándalo" (porque de veras que no sé de qué se escandaliza la gente) sobre los contratos turbios entre Sony y Capcom con Resident Evil Village.
Como muchos ya sabréis por aquella entrada que publiqué hace algún tiempo, llevo unos meses esperando con muchísimas ganas la salida de Resident Evil Village. Y pese a que, como pudisteis leer recientemente, Resident Evil 7 me dejó algo frío pese a gustarme bastante, no puedo evitar emocionarme cada vez que salen nuevas noticias sobre Village. Si estáis siguiendo las noticias relativas al juego, estaréis al corriente de que ayer por la noche se realizó un nuevo Resident Evil Showcase, y como anunciaron cosillas bastante interesantes he decidido hacer una breve entrada recopilatoria dejando, como no, mi opinión sobre lo visto (porque para recopilatorios normales ya tenéis medios especializados que han sacado la noticia diez horas antes que yo. Aquí se viene a fangirlear y a echarse unas risas).
Me gustan los juegos raros, es algo que no puedo evitar. Lleva pasándome toda la vida. Cuánto más raro y surrealista parece un juego, MEJOR. Y una cuenta pendiente que tenía desde que lo descubrí hace unos años, es este LSD: Dream Emulator del que os voy a hablar hoy.
Aprovechando las vacaciones de Semana Santa, y ante la inminente salida de Resident Evil Village, durante estos días que he podido disfrutar de algo más de tiempo libre, he decidido -de una vez por todas- saldar mi deuda con la aclamada séptima de Resident Evil. Un juego que en su momento no me llamó demasiado la atención, pero que me he visto "obligado" (que se note el entrecomillado, por favor) a jugar dada su relación directa con el próximo Village.
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