Otogi Myth of Demons (Xbox): Impresiones semifinales

Un par de semana atrás, publiqué las primeras impresiones de un juego que llevaba tiempo queriendo jugar, pero que por un motivo o por otro siempre terminaba aparcando. Además, aquellas primeras impresiones sobre Otogi, fueron desmentidas incluso antes de que se publicase la entrada. Tanto es así, que como si de leche semidesnatada se tratase, me veo en la obligación y el deber moral de publicar esta entrada por dos motivos. Uno es evidente; han cambiado muchas cosas desde que publicase aquel primer contacto con el título de From Software, que me han hecho ver a Otogi desde otra perspectiva totalmente distinta. La otra razón, la entenderéis al final de la entrada, pero básicamente  es que voy a tardar bastante más de lo esperado en terminar Otogi.

Respecto al apartado sonoro y visual, no hay nada que resarcir, lo que dije en su día es lo que sigo pensando. Gráficamente el juego es increíble, cada escenario al que voy llegando es aún si cabe más bonito y destructible que el anterior. La variedad de niveles es enorme, y las situaciones planteadas en cada uno de ellos son lo bastante distintas unas de otras como para no aburrirnos.

Bien, a parte de eso, si Otogi hubiera sido una quiniela no hubiera dado ni una. Iré por partes citando todas y cada una de mis meteduras de pata.

"En las dos horas y media que llevo jugadas, he superado 10 de los 29, por lo que si los restantes cuentan con la misma duración y dificultad, apunta a que se  trata de un juego bastante corto, siempre y cuando no busquemos purificar cada zona al 100%"

Y una polla como la manga de un franciscano. Desde que escribiese esas líneas, he conseguido avanzar tan sólo 5 niveles más y llevo cerca de 9 horas. ¿Corto? ni hablar, y lo de purificar las zonas al 100% se me antoja indispensable si se quieren conseguir nuevas armas y ante todo si se pretende subir el nivel a Raikoh, elemento indispensable y ahora veréis el porque.

"En los diez niveles que llevo no he muerto ni una sola vez a excepción de un nivel en el que moría pero no por culpa de un enfrentamiento, es más aún estoy intentando averiguar cual es de entre todas las barras la que indica la salud"

BOCAZAS! Suso, eres un BOCAZAS y un prepotente. A partir del nivel 10, empecé a encontrarme situaciones bastante comprometidas que me han puesto en más de un aprieto, y en las que he muerto varias veces. El juego se va complicando bastante a medida que avanzas, precisamente por eso, volver a niveles anteriores a purificar y matar enemigos para subir de nivel, es totalmente necesario.

"La acción hasta el momento tiene de frenética lo que servidor de cuerdo. Es decir, bastante poco."

MENTIRA! No, no es que haya recuperado la cordura, es que así como los primeros niveles del juego son algo más suaves, a medida que avancemos empiezan a salir enemigos (cada vez más raritos) por todos lados, y si no me creéis mirad la siguiente foto

Enemigos derrotados: 240, y pude seguir matando más pero me cansé.

"Si eres lo suficiente habilidoso, dando un salto al inicio del nivel y apretando el gatillo en el momento preciso, puedes terminar el nivel sin haber pisado el suelo"

Si, puedes... en los primeros niveles que son cortos. Aparte de que ya descubrí cual es la barra de salud, hay otra barra que también se gasta y es la del MP, el dash consume MP, si lo agotas adiós al planeo.

"la profundidad de exploración dista mucho de la que podríamos esperar de un juego del género RPG."

A medida que avanzo me voy encontrando con mapas más grandes llenos de cosas que encontrar, además como ya he comentado, es imprescindible volver a los niveles anteriores para obtener nuevas armas, nuevos poderes y nuevos accesorios, de no hacerlo, os aseguro que tarde o temprano terminaréis atascados.

¿Por qué voy a tardar en terminar Otogi? fácil, no sólo porque se trata de un juego muy extenso, sino porque además se trata de un juego que requiere paciencia, tiempo y dedicación. Por paciencia no hay problema, por tiempo sí. Voy a dejarlo apartado hasta el verano cuando disponga de más tiempo, porque me encuentro con que puedo tirarme dos horas (que es la media diaria que dedico aproximadamente a jugar durante el año) sin haber avanzado absolutamente nada y eso al final termina quemándome. Otogi es una joya, de eso ya no me cabe duda alguna, pero hay que cogerlo sin prisa si se quiere disfrutar. Así que por el momento, estas son mis impresiones semifinales. No puedo decir mucho de la historia, avanza muy despacio y pese a llevar ya unas cuantas horas, la mitad me la he pasado prácticamente repasando niveles anteriores con tal de ganar niveles y habilidades que me faciliten las cosas.

En cuanto al control, me sigue pareciendo especial, pero una vez te habitúas el manejo de Raikoh resulta sencillo y muy dinámico.

No puedo sacar por el momento unas impresiones finales como es lógico, lo único que puedo decir es que si os topáis con él a buen precio, no dudéis en probarlo porque bien merece la pena.